Zelensky: "Paz", "victoria", "Ucrania" son palabras por las que hemos estado luchando durante cien días

"Paz", "victoria", "Ucrania" son tres palabras por las que Ucrania ha estado luchando durante cien días después de ocho años.

El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, lo dijo en un discurso de vídeo al llegar el día 100 de la guerra a su fin, informa Ukrinform.  

"¡Gran gente de la gran Ucrania!  

Hace exactamente cien días nos despertamos en otra realidad. Hace exactamente cien días nos despertamos siendo ya otros. Cuando los ucranianos se despiertan no por el brillo de los rayos del sol, sino por las explosiones de misiles que impactan en nuestros hogares, entonces se despiertan ucranianos completamente diferentes.  

En 2014, Rusia vino a nosotros con una palabra. Con la palabra nueva. Esta es la palabra "guerra". El 24 de febrero, Rusia agregó a esta palabra la otra, haciendo la frase "guerra a gran escala".  

Durante cien días encontramos o recibimos, vimos o quisimos borrar otras palabras. Hay pocos de ellos. Ellos son diferentes. Pero reflejan lo que hemos vivido.  

Entre estas palabras hay nuevas para nosotros. Tanto aquellas que fueron olvidadas por nuestros padres, pero que teníamos que recordar. Bien conocidas por todos en el planeta. Como esas que toda la gente tiene que recordar con horror. Palabras dolorosas. Como las que realmente nos dan esperanza. Todos son importantes. Será correcto recordárselas a todos hoy. Cien días es cien palabras. 

En primer lugar, estas son dos palabras: "nuestros héroes". Es decir, en primer lugar, las personas que han estado defendiendo nuestro Estado desde la noche del 24 de febrero hasta hoy.  

Luego, las palabras ucranianas: "palianytsia", "Fuerzas Armadas", "Stugna", "Kozak", "Isla de las Serpientes" y ... por supuesto, "Chornobayivka", que es una palabra que ha sonado muchas veces y en la que se puede ver todo tanto sobre nuestra resistencia, como sobre nuestros enemigos.  

También, palabras extranjeras que se han vuelto nativas de Ucrania: "Bayraktar", "Harpoon", "HIMARS", "Starlink", "Rzeszow" y ... por supuesto, "préstamo y arriendo" [lend-lease, ed.]: otra palabra, solo una, pero que refleja 100 días de lucha, cien días de diplomacia, cien días de apoyo.  

Una palabra que refleja algo importante en nuestro carácter. Está en el carácter ucraniano. Los Javelin, que asustaban a los enemigos porque no esperaban que no serían salvados por armaduras. Luego, una sonrisa, nuestra sonrisa, cuando los ucranianos también pintaron "Santa Javelina".  

Bueno, la palabra con la que todos en Ucrania hacen un brindis: "Neptun".  

Todos los días tenemos palabras que son mucho más que palabras para todos. Palabras duras. "Gostomel", "Borodyanka", "Ojtyrka", "Cherníguiv", "Járkiv", "Jersón", "Izium", "Melitopol", "Mariupol" y "Azovstal". 

Vienen con ellas: "ejército", "arta" [artillería, ed.], "infantes de marina", "guardias fronterizos", "inteligencia", "soldados de la Guardia Nacional", "Policía", "defensa territorial", "aviación", "nuestros heroicos pilotos" ... También la palabra "fantasma". El fantasma de Kyiv. Quien eliminó a enemigos y sobrevivió.  

Puede que no hayamos escuchado todas estas palabras tantas veces en nuestras vidas como las hemos escuchado en estos cien días. Cada vez que las escuchamos, sabemos: nos dan el tiempo y la oportunidad de vivir tanto cuanto nos está prescrito por Dios. No por el adversario.  

"Dios" es una palabra, un llamamiento que se ha escuchado más de una vez. Cada vez de manera especial.  

También hubo palabras que nuestro enemigo quería borrar. "Volnovaja" y "Saltivka", "Popasna" y "Severodonetsk". Estas son palabras que definitivamente escribiremos de nuevo. Pero a nuestro gusto. Al igual que "Bucha". Al igual que "Mariupol". Las escribiremos junto a la palabra "tribunal".  

Para asegurarse que otras palabras, que son "filtración", "deportación", "tortura", "fusilamiento”, "bombardeo en alfombra", "ataque con misiles", obtengan una respuesta. La respuesta con una sola palabra: "justicia". Justicia que se convertirá en un punto después de las palabras temporales para nosotros "ocupación", "Mordor", "orcos". Por supuesto, se eliminarán de nuestro diccionario. Definitivamente los expulsaremos de nuestra tierra.  

También hubo palabras que dieron esperanza y por las que luchamos especialmente. "Corredores humanitarios". Los cuales se han convertido en una forma de vida para cientos de miles de personas. Y que hizo posible superar otra palabra, la terrible palabra "bloqueo".  

Desde el primer día tenemos palabras con nosotros, la distancia entre las cuales es como entre la oscuridad y la luz. Evitamos una palabra. Esta palabra es refugiados. En otras palabras, creemos que millones de nuestros ciudadanos tienen futuro. Lo tienen en casa, en Ucrania. Esta palabra es desplazados.  

Mucho ha cambiado.  

Cuando escuchamos la palabra "Patrón", recordamos al zapador más famoso de Ucrania. Y cuando escuchamos: un maratón, entendemos que no se trata de deporte en absoluto.  

Ppor supuesto, se han agregado muchas palabras mortales a nuestro diccionario. Lo que ningún hombre ni ninguna mujer ucraniana jamás quisieron ver. De lo que ninguna persona normal puede estar orgullosa. "Iskander(s)", "Kalibre(s)", "Solntsepiok(s)", "bombas de fósforo" y más. 

Por alguna razón no vemos su tan alabado tanque "Armata". Creo que tenían miedo de nuestra nueva frase: tropas tractoras.  

Vale la pena mencionar una frase más: "el segundo ejército del mundo". Al principio parecía amenazante. Luego era peligroso. Después de Bucha se convirtió en repugnante. Ahora solo provoca una sonrisa amarga. Porque ¿qué queda de él? Del ejército, que se llamaba el segundo ejército del mundo... Crímenes de guerra, vergüenza y odio.  

Les cito cifras en lugar de palabras. Cuando ves el número de muertos cada mañana. Número de heridos. Número de bombardeos. Número de misiles. Cuando hay niños al lado de la palabra, un número nuevo cada día. Hoy hay los 261. Ya 261 niños fueron asesinados por la invasión rusa. ¿Para qué? No hay palabras que puedan responder a esta pregunta.  

Han aparecido palabras que ahora son muy comunes. Que suenan a diario. Pero debemos asegurarnos de que para nuestros hijos ya no signifiquen lo que significan para nosotros hoy. Para que puedan percibirlas solo como historia. En primer lugar, es la palabra "ruinas". Pero también: sirena, amenaza aérea, toque de queda, puesto de control, alambre de púas. Además de la palabra minas.  

Habrá muchas más palabras que todos sabrán. Lo que tendrá sentido para todos. Y que dará una oportunidad a millones. Estas son las palabras: reconstrucción, candidatura y adhesión, garantías y seguridad. Y, definitivamente, la palabra "retorno". Por supuesto, basado en la palabra que era un sueño y que se convertirá en realidad: "liberación".  

¡Estas son las palabras de nuestro futuro! Estas son palabras sobre lo que haremos con nuestro 'viburno rojo', con nuestra 'gloriosa Ucrania'.  

Palabras sobre hacia dónde se dirige y siempre se dirigirá el buque de guerra enemigo. Sobre qué hacer con los ocupantes cuando alguien dice: "¡Vova!". Y, por supuesto, nuestro ya popular: "¡Buenas noches! ¡Somos de Ucrania!".  

De Ucrania, donde 'el campo florece y ella se vuelve gris’. De la Ucrania que ha resistido, sigue resistiendo y resistirá.  

Ucrania, cuya gloria y libertad aún no han muerto. ¡Ucrania, a la que le decimos - Gloria! ¡Gloria a Ucrania! ¡Gloria a la nación! Y todos saben completar la frase: "¡Muerte a los enemigos!".  

Porque hay tres palabras por las que hemos estado luchando durante cien días después de ocho años: paz, victoria, Ucrania.  

¡Gloria a Ucrania!".

Foto: Oficina del Presidente 

AV