Rusos llevan los cuerpos junto con el hormigón de debajo de los escombros a los vertederos de Mariúpol

En la ciudad temporalmente ocupada de Mariúpol, el número real de muertos puede ser mucho mayor que el informado. Los cuerpos de las víctimas se sacan junto con hormigón de debajo de los escombros, y de 50 a 100 personas fueron enterradas vivas debajo de cada casa destruida.

Según Ukirnform, lo publicó en Telegram el Ayuntamiento de Mariúpol.

“Se demuelen casas sin desmontar los escombros. Los cuerpos de los residentes de Mariúpol asesinados se retiran junto con hormigón. Luego, los ocupantes rusos los llevan como basura a los vertederos de desechos domésticos sólidos de Mariúpol”, afirma el informe.

Junto con los escombros, los cuerpos de las víctimas se apilan en el vertedero de desechos domésticos sólidos de Livoberezhy, así como en el vertedero de Prymorsky, que quedó fuera de servicio en 2008.

Según el alcalde de Mariúpol, Vadym Boichenko, al principio los ocupantes rusos involucraron a los residentes locales en el desmantelamiento de los escombros. Pero, al ver la cantidad real de cuerpos recuperados de debajo de los escombros, inmediatamente despidieron a los lugareños de tales trabajos, y el llamado Ministerio de Emergencias de la DNR (República Popular de Donetsk) vino a limpiar los escombros.

“Ahora ni siquiera están intentando recuperar los cuerpos. Simplemente están demoliendo casas y removiendo los escombros junto con los cuerpos de los residentes asesinados de Mariúpol, ya que el número real de personas que murieron bajo los escombros es aterrador. Hay entre 50 y 100 víctimas enterradas debajo de casi cada casa destruida, y 1.300 bloques de apartamentos fueron destruidos en Mariúpol. Por lo tanto, el número real de muertos, lamentablemente, puede ser mucho más alto de lo que habíamos informado”, enfatizó Boichenko.

Recordemos que la agresión armada rusa provocó una de las peores catástrofes humanitarias en la ciudad de Mariúpol. Ahora la ciudad está en ruinas y carece de servicios normales de suministro de electricidad, agua y gas. Alrededor de 22.000 civiles han muerto desde que comenzó la invasión rusa.

SM