Rusia quiere una “guerra de trincheras" interminable como durante la Primera Guerra Mundial

Un campo minado en la cabeza de puente Tokmak-Melitópol bloqueó el avance de las tropas ucranianas durante varias semanas mientras los zapadores despejaban lentamente el camino de asalto, pero ahora esa barrera ha sido superada. Las Fuerzas Armadas atravesaron la primera línea de defensa de Rusia. La segunda línea principal es la siguiente.

¿Cuáles son nuestras perspectivas en el sur?

LA SEGUNDA LÍNEA DE DEFENSA DEL ENEMIGO: ¿SERÁ REALMENTE MÁS FÁCIL ROMPERLA?

Hoy en día, muchos expertos, tanto ucranianos como occidentales, enfatizan constantemente que la segunda línea de defensa del enemigo, la llamada "línea Survikin", está menos fortificada y será mucho más fácil superarla que la primera.

Sin embargo, ¿no están sobrevaloradas las expectativas? ¿Qué problemas pueden enfrentar las Fuerzas Armadas de Ucrania?

En un comentario a Ukrinform, el observador político y militar del grupo Resistencia Informativa, Oleksandr Kovalenko, describió la segunda línea de defensa rusa como diferente, pero no más fácil.

La profundidad de la segunda línea de defensa puede ser de hasta 15 km. La diferencia entre estas líneas de defensa es que la primera es la cobertura total con minas: barreras hipertrofiadas de minas y cargas de alto explosivo.

“Se trata de gran cantidad de vehículos de combate de infantería, vehículos de combate de infantería aerotransportable, transportes blindados de personal, tanques, artillería. El equipo se está colocado en la frontera con la tercera línea para, al menos, protegerse de alguna manera de un contraataque muy eficaz por parte de las Fuerzas de Defensa de Ucrania”, explicó el observador político y militar. “Si antes la remoción de minas era nuestro problema, ahora es la destrucción del hierro".

Nuestros soldados ya han iniciado este proceso. En agosto se estableció un récord absoluto de artillería rusa destruida: 691 unidades. Kovalenko dice que esto excede la capacidad del complejo industrial-militar ruso para compensar una pérdida tan grande.

Además, en agosto se obtuvo la segunda cifra de todo el período de la Gran Guerra de destrucción de vehículos y tanques enemigos con combustible y lubricantes: 685. Solo en marzo de 2022 se quemaron más (865 unidades), cuando los convoyes logísticos de los ocupantes fueron destruidos sin parar cerca de Kyiv.

Pero eso no es todo.

“Hay un matiz interesante. Ya durante nuestra contraofensiva, los rusos comenzaron a utilizar reservas de la segunda línea de defensa. Y ahora tienen unidades agotadas en la segunda línea. Es decir, casi no queda reserva. Se ven obligados a sacar reservas de otras cabezas de puente. Además, no hay suficiente personal en cada unidad, el componente mecanizado no es perfecto. Así que podemos decir que los rusos en la segunda línea no tienen la funcionalidad completa de sus unidades para llevar a cabo la defensa”.

Por ejemplo, la dotación de personal del grupo de las tropas Dnepr y Vostok, que luchan en el sur se encuentra entre los peores de la zona de guerra. Los ocupantes simplemente no tienen tiempo para compensar sus pérdidas y equipar a las unidades.

“De esto podemos concluir con cautela que los rusos ofrecerán una resistencia más débil en la segunda línea de defensa que en la primera. Sin embargo, no descarto que las Fuerzas Armadas de Ucrania puedan llegar en Tokmak a finales de septiembre", enfatizó oleksandr Kovalenko.

Mapa de los combates en el sur / Fuente: Espreso

El coronel de reserva de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Sergiy Grabsky, dice que la segunda línea de defensa de la Federación Rusa no es tan poderosa como la primera, pero...

“Lo más importante es que ya tenemos posibilidades de maniobra, aunque limitadas. Porque atravesar pasillos en campos minados densos y continuos es una tarea extremadamente difícil. Se trata de una estrecha franja de terreno a través de la cual nuestras unidades sólo podían filtrarse”, subraya el experto militar. “Con acceso a la segunda línea de defensa, todavía tenemos campos minados menos densos. Sin embargo, todavía es difícil, hay que entenderlo. Pero tenemos la oportunidad de maniobrar nuestras unidades blindadas y mecanizadas, lo que nos permite ampliar este corredor de presión y crear las condiciones previas para ingresar al espacio operativo. Sin demasiado patetismo, los próximos días o un par de semanas determinarán el desarrollo de la situación en dirección sur".

QUEMAN LOS CAMPOS DE MINAS PARA DETENER A LAS FUERZAS ARMADAS DE UCRANIA: EL EFECTO DE ESTAS ACCIONES ES A CORTO PLAZO, HABLA MÁS DE LA CONFUSIÓN DEL ENEMIGO.

La edición estadounidense de The New York Times publicó una noticia: “En el sur, donde continúa la ofensiva de las fuerzas ucranianas, los rusos comenzaron a utilizar una nueva táctica: llenan sus propios campos minados con material combustible y luego, cuando las fuerzas armadas comienzan a moverse, utilizan un dron para lanzar una granada provocando así incendios y explosiones”.

Así que, aquí hay dos momentos.

Primero, debemos señalar que las tácticas de los rusos, que los periodistas del NYT por alguna razón llaman "nuevas", están lejos de ser nuevas. En la historia más reciente, se utilizó una táctica similar durante la guerra relativamente reciente en Yugoslavia.

Segundo, las intenciones de los rusos son difíciles de entender, porque, por ejemplo, al prender fuego a sus propios campos minados, en realidad están desminando lo que ellos mismos minaron. ¿Lo que significa que debería ser una ventaja para nosotros? Así que la pregunta es: primero, ¿por qué hacen esto? y, segundo, ¿realmente les va a ayudar de algún modo a contener a las Fuerzas Armadas de Ucrania?

El portavoz del centro de prensa conjunto de las Fuerzas de Defensa de la dirección de Tavriya, Oleksandr Shtupun, dice que la táctica de incendiar campos minados para obstaculizar el avance de las Fuerzas Armadas de Ucrania no es nueva y es utilizada por el enemigo desde 2014. Y hoy no es un fenómeno masivo.

“Tales acciones conducen tanto a un resultado positivo para el enemigo como a uno negativo, ya que de este modo están desminando sus propios campos de minas (de ahí que no nos equivoquemos, autor). Pero hay muchos tontos en Rusia, así que tal vez sigan haciendo esto”, dice Shtupun.

Esquema aproximado de la construcción de las fortificaciones de los invasores rusos en la llamada "línea Surovikin", según la imagen proporcionada por The Telegraph en mayo de 2023.

Sergiy Grabarsky añade que prender fuego a campos minados produce un efecto a corto plazo similar al bombardeo de mortero.

“Cuando una unidad entra, convencionalmente, en una zona determinada de un campo de minas, crea así una zona de fuego continuo con explosiones. Es peligroso, pero insisto en que la palabra clave es a corto plazo. Esta es una manifestación de la desesperación del enemigo, que no encuentra otras oportunidades para contener a nuestras unidades", afirma el coronel de reserva. “Y el tercer factor es el factor tierra arrasada, el enemigo está haciendo todo lo posible para convertir estas áreas en un desierto durante la retirada".

Grabsky añade que los ocupantes, al crear de esta manera una barrera de fuego y minas, están tratando de ganar algo de tiempo, literalmente de media hora a una hora, para retirarse a algunas posiciones y atrincherarse allí.

Al mismo tiempo, el general del ejército y exdirector del Servicio de Inteligencia Exterior de Ucrania en 2005-2010, Mykola Malomuzh, dice: “Prender fuego a los campos de minas es una actividad de aficionados, lo que indica su confusión. La segunda y tercera líneas de defensa rusa son más débiles. Podemos avanzar de manera más eficaz. Por tanto, el enemigo está confundido, porque comprende que no podrá mantener su posición. Por tanto, por un lado, detienen temporalmente nuestro movimiento. Pero, por otro lado, sus campos de minas explotan por tales acciones. Así que una vez más: se trata de la actividad de aficionados por parte de los rusos, y no tiene perspectivas".

El coronel de reserva de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Roman Svitan, cree que el ejército ucraniano también podría recurrir a tácticas similares.

“La quema de campos de minas se conoce desde la guerra de Yugoslavia. Para desminar los territorios en la línea de contacto, se pueden utilizar bombas aéreas de detonación volumétrica”, explica el experto militar. “Actualmente no hemos desminado ni siquiera el 1% de todas las minas colocadas por la Federación de Rusia en la dirección de Tavriya. Y Ucrania tiene un arsenal suficiente de bombas de detonación volumétrica, ya que apenas se utilizaban antes".

TOKMAK: ¿MERECE LA PENA TOMAR FÍSICAMENTE ESTA CIUDAD O NO? ¿QUÉ RIESGOS EXISTEN?

Después de haber pasado Robótyne, estamos avanzando cerca de Novoprókopivka y Verbovoye, es obvio que el objetivo es Tokmak. Hay algunas preguntas al respecto:

1. ¿Es necesario tomar físicamente esta ciudad en este momento, tal vez sea mejor circunvalarla?

2. Si circunvalamos Tokmak, ¿habrá riesgos, como exponernos a la amenaza de un ataque enemigo desde el flanco?

3. Si tomamos Tokmak… Existe la opinión de que la batalla por esta ciudad puede convertirse en una especie de Verdún moderna (de la Primera Guerra Mundial, ed.) o en una segunda Bajmut, sin embargo, ¿no para los ocupantes rusos, sino para las Fuerzas Armadas de Ucrania?

Preguntemos a los expertos qué piensan sobre todo esto. Un pequeño spoiler: la ciudad ucraniana de Tokmak definitivamente no se convertirá en la Verdún francesa, sin embargo, entrar o no en la ciudad es una cuestión.

Según Oleksandr Kovalenko, hay dos opciones aquí: o los rusos huirán de Tokmak, es decir, harán otro "gesto de buena voluntad", o mantendrán su defensa hasta la última gota de sangre.

El experto militar apuesta a la primera opción. Y explica por qué.

O. Kovalenko: “Según cómo se desarrollarán los acontecimientos ahora, podemos decir que las fuerzas de defensa de Ucrania han elegido la dirección principal: la ruta 0408, o, mejor dicho, los flancos derecho e izquierdo de esta ruta.

Además, existe una salida a Ocheretuvate con el cruce de la ruta 0401. Así que, si salimos hacia Tokmak por la ruta 0408 y también por la 0401, la ciudad quedará bloqueada por el norte y el noreste.

Finalmente, de la ruta 0408 a través del pueblo de Chervona Ghirka o Sadove, podemos ir a la autopista P-37 para bloquear Tokmak desde el noroeste.

Hay muchas opciones. Cómo serán realmente las cosas es decisión del Estado Mayor General. Sin embargo, somos realmente capaces de tomar Tokmak en un semicerco. Y más tarde, en general, cerrar Tokmak ya en condiciones operativas".

Por supuesto, el mando de ocupación ve y comprende todo esto. Pero...

“No les va bien con las reservas en la dirección de Zaporiyia. Como ya he dicho, se dedicaron fuerzas considerables a impedir que las Fuerzas Armadas de Ucrania atravesaran la primera línea. Por lo tanto, lo más probable es que los rusos pronto hagan un "gesto de buena voluntad" y se retiren de Tokmak para preservar los restos del personal, para preservar al menos algo de equipo, al final, para preservar al menos algo”, cree el observador militar.

A su vez, el jefe de programa de seguridad del Centro de Estudios Globales "Estrategia XXI", Pavlo Lakiychuk, dice: “Shoigu ya les está diciendo a los rusos: "La situación más tensa es en la dirección de Zaporiyia”. Pero todavía no habla de la inevitabilidad de las "decisiones impopulares". De hecho, estamos teniendo éxito en el área Tokmak-Melitópol. Pero es un poco pronto para hablar del asalto a Tokmak o de su asedio. El enemigo está trasladando reservas a los flancos de nuestra "cuña", es decir, tiene la intención de atacar por los flancos (entre los mismos Orijiv y Robótyne, por ejemplo, que son atacados por la artillería rusa, ed.). Para una mayor ofensiva, tenemos que asegurarlos".

Si se trata de la liberación de Tokmak, cubrirla desde el este y el sureste parece, según él, la opción más obvia.

“Sin embargo, lo decidirá nuestro mando. Quizás durante este periodo resulte que Tokmak no era el objetivo principal. Y ni siquiera Melitópol. Y la punta de lanza del ataque principal está en un lugar completamente diferente. Así que no compares la ofensiva en el sur con la batalla de Verdún”, dijo Lakiychuk.

Roman Svitan recuerda: “Tokmak en sí es un centro logístico. De Tokmak se abastece parte de los territorios de Jersón y Zaporiyia ocupados por los rusos. Hay tres ramales a Tokmak: el ferrocarril (del este al oeste de Cherníguivka a Tokmak), la carretera de Berdiansk a Tokmak y la carretera de Melitópol a Tokmak”.

Comenzaremos a cortar estos hilos que alimentan a Tokmak.

"Tales acciones obligarán a los rusos a retirarse de Energodar y de la propia Tokmak, ya que solo podrán resistir unos pocos días sin suministros. Los rusos se irán inmediatamente porque sus equipos necesitan un suministro constante de municiones. Sin municiones, es solo un montón de hierro. Lo dejarán y se irán".

Según el experto militar, esto es exactamente con lo que cuentan las Fuerzas Armadas de Ucrania, por lo que se dirigen principalmente solo hacia Tokmak, ni siquiera hacia la propia Tokmak, sino un poco más al este.

"Ahora nos movemos de Robótyne a Verbove y luego nos moveremos al sur hasta el ferrocarril. (…) El semicerco de Tokmak provocará la destrucción del frente ruso, especialmente en la margen izquierda del embalse de Kajovka", resumió Svitan.

¿SEMILARIDAD DE LA SITUACIÓN CON LA PRIMERA GUERRA MUNDIAL? ¡ESTA ES EXACTAMENTE LA AFIRMACIÓN DIFUNDIDA POR RUSIA!

Después de la primera ola de conversaciones sobre la supuesta "ofensiva lenta" de las Fuerzas Armadas de Ucrania, ha surgido una segunda ola en Occidente, con el mensaje principal de que la situación en el sur de Ucrania es muy similar a la Primera Guerra Mundial. Y la Primera Guerra Mundial fueron campos minados, trincheras, bastiones y fosas antitanques a lo largo de cientos de kilómetros, largos meses de enfrentamiento entre dos ejércitos sin avances apreciables. ¿Qué tan apropiada es esta comparación? Los optimistas dicen que hoy, en el siglo XXI, las Fuerzas Armadas de Ucrania tienen los medios modernos, las armas, etc., para evitar tal escenario. Se podría estar inmediatamente de acuerdo con esto si hace cien años los ejércitos no estuvieran ya armados con tanques, aviones y artillería. Por supuesto, no eran tan modernos como lo son ahora, pero aún así...

“En cuanto a la guerra de trincheras de la Primera Guerra Mundial... Esta comparación no es del todo apropiada. ¿Por qué? Primero, estamos hablando de tiempos completamente diferentes y, segundo, de tecnologías completamente diferentes. La guerra de trincheras que presenciamos actualmente en el sur no se puede comparar con la guerra de trincheras de hace 100 años", dice Oleksandr Kovalenko.

Tokmak no se convertirá en Verdún, las luchas por ella no serán análogas a la Primera Guerra Mundial, subraya el observador del grupo Resistencia Informativa: "Nadie liberará esta ciudad en 10 meses, las Fuerzas Armadas de Ucrania lo harán mucho más rápido. Lo único que se puede decir es que a finales de noviembre o principios de diciembre puede haber una pausa operativa en el frente, sin grandes movimientos, pero con combates posicionales. ¿Se puede llamar a esto una guerra de trincheras? Solo de forma condicional, porque la pausa será provocada por las condiciones meteorológicas y no por otra cosa. Pero tan pronto como pase el invierno, tan pronto como lleguemos a principios de la primavera, la ofensiva ucraniana en el sur se intensificará nuevamente".

Pavlo Lakiychuk comparte la misma opinión: "Para aquellos que comparan los combates en el sur con la Primera Guerra Mundial, me gustaría recordarles que, además de la batalla del Somme y la batalla del Marne, esta guerra también es conocida por la batalla de Amiens y la ofensiva Brusílov. La victoria no sólo se forja con las armas, sino también con una maniobra inesperada para el enemigo".

La Primera Guerra Mundial

Sin embargo, el veterano de la guerra ruso-ucraniana, académico y publicista, Yevgen Dyky, cree que este paralelo no es infundado. Después de todo, la línea Surovikin en sí misma es una poderosa referencia de varios kilómetros de largo a la Primera Guerra Mundial.

"Mirándolo bien, uno podría incluso tener la impresión de que estamos luchando contra recreadores históricos locos", insiste Dyky. "Durante la Primera Guerra Mundial, toda Europa fue excavada en líneas similares a las “líneas Survikin”, con docenas de trincheras de tierra conectadas por laberintos de ratas y fortines de hormigón cada 5-10 kilómetros".

Fue en estas "líneas Surovikin" donde lucharon los soldados de la famosa novela de Remarque “Todo tranquilo en el frente occidental”. Fue en estas "líneas Surovikin" donde vivieron y murieron millones de personas durante años...

"Los rusos han construido en el sur una copia en miniatura de las líneas de defensa paneuropeas de 1914-1918 y ahora están difundiendo la idea de que, si entonces, a principios del siglo XX, la guerra en esas líneas de trincheras duró años y no condujo a un cambio en la línea del frente, lo mismo sucederá ahora. Segundo, los rusos han aprendido a ajustar sus operaciones psicológicas (PSYOP), ya no son tan "hachados" y estúpidos como lo eran hace un año. Después de Járkiv y Jersón, ya no se propaga la leyenda de que "el ejército ruso siempre gana" (ya nadie cree en eso), sino que se promueve una nueva historia sobre el llamado "empate en combate" en el sur", dice el experto.

Pero no es así. O, mejor dicho, como dijo nuestro interlocutor, no es necesariamente así.

"Este escenario es el más deseable para los rusos. Pero no es nada seguro que puedan hacer frente a esta tarea”, señala Yevgen Dyky. “La pregunta es cuántos efectivos habrá en estas trincheras y fortines, y en qué medida se proporcionarán armas y municiones a ese personal".

Por eso las Fuerzas Armadas de Ucrania no trabajan actualmente tanto con trincheras y fortines como con las reservas de los ocupantes. Y los ocupantes tienen cada vez menos reservas.

"Las Fuerzas Armadas de Ucrania están trabajando para que en algún momento estas trincheras y fortines queden vacíos. Personalmente, veo motivos para un optimismo cauteloso. Pero hablaremos de eso más adelante. En lo que respecta a la tecnología, no ha cambiado mucho en 100 años. Cuando escucho ahora una frase como "guerra de drones", sinceramente, me sonrío. No es una guerra de drones, es una guerra de infantería, como en la Primera y Segunda Guerra Mundial. Y los drones e incluso cañones autopropulsados y vehículos blindados son más o menos una herramienta auxiliar. Pero, ante todo, se trata de una guerra de enormes masas de soldados rasos", insiste el ex comandante de Aidar.

En cuanto a la ruptura de la "línea Surovikin", aquí, afirma, es absolutamente apropiado referirse a la experiencia de la Primera Guerra Mundial. Después de todo, con toda la tecnología moderna, la humanidad no ha inventado otra forma de asaltar tales líneas en cien años que infligir primero el máximo daño al enemigo con artillería y luego, en cualquier caso, un soldado de infantería común debe arrastrarse por el suelo o correr bajo el fuego con un rifle en la mano y saltar a la trinchera enemiga.

"Y solo allí [en la trinchera] termina la batalla. Desafortunadamente, nada ha cambiado desde la época de Remarque. Al final, fue durante la Primera Guerra Mundial cuando surgió el concepto de "batallones de asalto" y "compañías de asalto", unidades para romper las fortificaciones enemigas·, dice Dykyi. "De ahí viene la infantería de asalto: de la Primera Guerra Mundial, de estas enormes líneas Surovikin".

Sin embargo, todo lo anterior no significa que la situación sea desesperada.

Yevgen Dyky: «Ninguna línea de defensa se protege a sí misma. Está protegida por el personal. Y los moscovitas tienen problemas con esto: sus reservas se están derritiendo". ¿Por qué pienso eso? La primera prueba para mí fue el despliegue de paracaidistas de Pskov cerca de Robótyne, desde la margen izquierda de la región de Jersón, que también tiene un gran valor estratégico para Rusia. Si los rusos exponen una parte importante del frente, significa que simplemente no hay ningún otro lugar adonde llevarla. La segunda prueba es cuando nuestros soldados de la Dirección Principal de Inteligencia (GUR) destruyeron bombarderos estratégicos en los aeródromos Soltsy y Shaykovka. La operación, como se conoció, se llevó a cabo en territorio enemigo, desde un bosque vecino, en algún lugar detrás de un abeto, utilizando helicópteros que vuelan varios kilómetros. Y cuando los rusos empezaron a pensar en "cómo llegamos a vivir así", resultó que los aeródromos estratégicos, donde, entre otras cosas, se encuentran los portaaviones nucleares, están vigilados por... aeromecánicos. En su tiempo libre les entregan ametralladoras y los colocan en el perímetro. Sin embargo, según la dotación correcta, un aeródromo estratégico debería estar vigilado por todo un batallón de infantería motorizado. ¿Y a dónde fue este batallón? En el momento de la operación de la GUR en Shaykovka, este batallón de infantería motorizado llevaba un mes en el frente. Es decir, si los moscovitas eliminan la seguridad de los aeródromos estratégicos y los envían al frente, este es un indicador muy claro".

Otro indicador es el intento de ofensiva rusa de distracción en la línea Svátové-Kreminná.

Yevgen Dyky: “Aquí es donde atacaban Lymán y ahora atacan Kúpiansk. Sí, empezaron todo esto para alejar nuestras fuerzas del sur. Y de hecho fue una jugada inteligente por parte del enemigo. Pero resultó ser un juego de los dos lados. Se supo que la Federación Rusa tuvo que trasladar paracaidistas de la región de Lugansk a Roboótyne. Así que, primero, no tienen reservas en el interior, están eliminando la seguridad de los aeródromos y, segundo, todo lo que está listo para el combate ya está dentro del frente. Y comienza lo que en Rusia se llama "el caftán de Trishkin", lo que significa que, si quieres hacer un dobladillo en la manga derecha, debes cortarla por la izquierda. Y es por eso que creo que no lograrán reproducir la versión de la Primera Guerra Mundial, obligándonos a luchar durante años contra la línea Surovikin. Su defensa ya se está resquebrajando. Pero resquebrajarse y venirse abajo son cosas distintas".

El mando ruso es muy consciente del precio de la cuestión y, por lo tanto, predice Dykyi, ahora enviarán a todas las reservas restantes a Tokmak.

Las Fuerzas Armadas de Ucrania se enfrentarán a una batalla difícil. Pero si atravesamos Tokmak, creo que el enemigo simplemente no tendrá suficientes reservas. Por lo tanto, esta línea debería desmoronarse", resumió el experto.

Myroslav Liskovych, Kyiv