Lilia Lemoine, diputada argentina del partido de Milei
Los medios estatales rusos intentan apoderarse de los grupos mediáticos argentinos
06.11.2024 10:20

En octubre, la miembro de la Cámara de Diputados, la cámara baja del Congreso de la Nación Argentina, que forma parte de la fuerza política del presidente Milei, La Libertad Avanza (LLA), Lilia Lemoine, realizó una visita informal a Ucrania junto con su compañero de partido, el representante de Argentina en el Parlamento del MERCOSUR, Ivan Dubois, para mantener una serie de reuniones con funcionarios y líderes de la sociedad civil de Ucrania en un intento de conocer mejor el país cuya la lucha contra la agresión rusa encuentra un gran apoyo del nuevo líder de Argentina.

Lemoine, una ex especialista en informática, artista y destacada cosplayer, es relativamente nueva en política, pero está llena de entusiasmo por promover la agenda de Javier Milei. Además, como alguien cuyos antepasados ​​se vieron obligados a huir de Ucrania en la era de Stalin, apoya enérgicamente a Ucrania y admite que la Rusia moderna es tan malvada como los comunistas y los nazis.

La diputada habló con Ukrinform para explicar qué problemas han estado atormentando al país durante décadas, qué tipo de experiencia le gustaría obtener de las autoridades ucranianas, cómo la propaganda y la desinformación rusas distorsionan la visión del mundo de la gente en su país y cómo ve la lucha de Ucrania por la libertad y la independencia.

MILEI FUE EL PRIMER POLÍTICO EN TRAER UNA BANDERA UCRANIANA AL PARLAMENTO

P: La primera pregunta es, por supuesto, sobre sus raíces ucranianas. ¿Siente esa conexión con el país? ¿La historia de su familia influye en su postura política?

R: Mis abuelos eran de Ucrania. Así que crecí comiendo comida ucraniana y escuchándoles hablar. Así que me acostumbré. Pero no ha pasado mucho tiempo desde que me involucré en la política. Después de la invasión rusa, Ucrania se convirtió en el centro de atención de Occidente, pero entiendo que la guerra comenzó mucho antes, no en 2022. En realidad, fue en 2014. Nadie debería invadir otro país como lo hizo Rusia.

Empecé a prestar más atención a estos acontecimientos en 2019, cuando entré en la gran política. Nuestra fuerza política no ganó las elecciones en aquel entonces, pero Volodymyr Zelensky sí lo hizo en Ucrania. Teníamos sólo fragmentos, fragmentos de información sobre Ucrania, sabíamos muy poco… Comencé a investigar sus opiniones políticas y lo encontré un poco libertario, como el presidente Javier Milei de Argentina. También me enteré de que Ucrania había prohibido el comunismo como tal. Entonces me sentí tan orgullosa de que hiciera ese movimiento. Mira, mis abuelos tuvieron que huir de la masacre, el Holodomor, uno de los peores genocidios de la historia, cometido por los soviéticos, y ahora la misma gente está intentando conquistar Ucrania, de nuevo. Mientras tanto, nosotros en Sudamérica seguimos luchando contra el comunismo porque la oficina central de esta fuerza está ahora en Cuba.

Nuestro actual presidente, con quien he tenido el honor de trabajar desde 2020, es el primer político de nuestro país en traer una bandera ucraniana al Parlamento cuando trabajaba en el Congreso. Fue un momento muy emotivo para mí. En aquel entonces, la opinión pública argentina no tenía muy clara su postura sobre Ucrania. La gente no sabía quién tenía razón o no, porque no teníamos información fiable. Además, nos vimos abrumados por la propaganda rusa. Es sorprendente lo enorme que sigue siendo ese flujo hasta el día de hoy.

Mi colega, que me acompaña en este viaje a Ucrania, Ivan Dubois, miembro del PARLASUR, la Asamblea Parlamentaria del MERCASUR, sabe desde hace mucho tiempo lo que realmente está pasando con la agresión rusa, pero incluso nosotros, los políticos, necesitamos tener más información para transmitirla a la gente común y a nuestros colegas legisladores. Por eso quería venir aquí, para tener más datos, para hablar con la gente.

Me doy cuenta de que lo que pasa aquí en Ucrania, de una manera u otra, afecta también a Argentina.

P: ¿Estuvo usted entre quienes informaron al presidente Milei sobre el contexto de la guerra ruso-ucraniana, incluidas las cuestiones históricas?

R: De hecho, ni siquiera era necesario. Él sabe de estas cosas, conoce la historia y el contexto. Y apoya completamente a Volodymyr Zelensky. Además, no hace falta ser historiador para ver lo que está haciendo Rusia. Ucrania recuperó su independencia en 1991 y ahora los rusos están intentando ampliar sus fronteras. No fue Ucrania la que invadió a su vecino. Por otra parte, si conoces la historia, también debes tener en cuenta que las reivindicaciones territoriales de Rusia parecen ridículas. Después de la fundación de Kyiv, pasaron literalmente siglos antes de que surgiera Moscú.

PARA ATRAER AL PÚBLICO EXTRANJERO, LOS RUSOS INTENTAN MOSTRARSE COMO LOS BUENOS.

P: Así que, quizás entienda por qué los ucranianos a veces se refieren a Moscú como un pantano…

R: Exactamente, porque en el lugar donde hoy se encuentra Moscú había un enorme pantano en la época en que Kyiv prosperaba.

Mientras tanto, todo lo que los rusos dicen a otros países es una gran mentira. Probablemente conozca muy bien las cosas que dicen sobre Ucrania en el extranjero. En su mayoría, se trata de que son un país “imaginario” que quiere serlo. Dicen que todos los ucranianos son nazis. Pero, de hecho, cualquiera que no apoye a Rusia es un nazi para el Kremlin.

Por eso intentan presentarse como los buenos, pero si nos fijamos en los hechos, eso no es posible por muchas, muchas razones.

Además, descubrí que en todo el mundo a los libertarios también se les etiqueta como nazis.

Puede que Rusia ya no sea un régimen comunista, pero tienen característica común muy importante: tienen líderes asquerosamente ricos, como el presidente Putin, frente a una población pobre y en dificultades. Lo mismo ocurre con Castro o Maduro. Si nos fijamos en el presidente Zelensky, para mí es un hombre normal. Sí, los rusos lo tildan de “payaso” porque es actor, porque no tiene experiencia en política. Lo mismo ocurre con Milei en Argentina, pero si se mira más de cerca, estos son realmente dos hombres valientes que luchan por la libertad de sus países. No por un sistema político, no por un gobierno, sino por la libertad de su pueblo.

Entiendo lo que es esencialmente Rusia, pero alrededor del 40 por ciento de la población de Argentina todavía la apoya. Y los rusos simplemente no logran ver la verdad que está en la superficie: un hombre rico te dice que debes apoyarlo, incluso morir por él. No tiene sentido.

NUESTRO PARLAMENTO ESTÁ INFILTRADO POR LA INFLUENCIA RUSA

P: Pero la gente acude en masa a las redes sociales y a los vídeos virales...

R: Sí, a veces hay que explicarlo con palabras sencillas para que la gente lo entienda y llegue al fondo del asunto. Porque la mayoría de la gente no dedica mucho tiempo a pensar en política, historia o cualquier otra cosa que no sea la que se encuentra en sus fuentes de información. Simplemente miran la televisión o algunos videos virales en YouTube y creen que esos videos son la verdad.

Durante años, los blogueros nos han estado diciendo en las redes sociales que Vladímir Putin es un derechista, que es un conservador que cuida de su pueblo. Funcionan de la misma manera en todo el mundo. No sólo en Ucrania, Argentina o Rusia: siembran la semilla de la desinformación en todo el mundo y gastan más dinero en desinformación que en cualquier otra cosa. En lo que los ucranianos son buenos es en actuar en el campo de batalla, enfrentándose a una fuerza rusa abrumadora.

P: ¿La influencia rusa se está extendiendo también a los grandes medios de comunicación de Argentina?

R: De hecho, los medios estatales rusos están intentando apoderarse de los grupos mediáticos de Argentina. Ahora lo están haciendo a través de una empresa con sede en Uruguay. Y mucha gente ni siquiera lo sabe. Pero nuestra fuerza sigue vigilante. Un representante de los medios de comunicación españoles, que intentó comprar un medio de comunicación en Argentina, escuchó del antiguo propietario que no lo conseguiría porque ya estaba siendo comprado por el ruso Sputnik.

P: ¿Y qué hace el gobierno al respecto?

R: El gobierno no puede hacer nada al respecto, pero yo y algunos periodistas hemos denunciado este caso, también hemos recibido cierta información de Estados Unidos. Además, nuestro parlamento está infiltrado por la influencia rusa, pero somos conscientes de ello y prestamos mucha atención.

P: ¿Todo eso lo expone?

R: Sí, y por eso me atacan constantemente en los medios. Estos ataques son realmente agresivos. Si no pueden matarte, buscan destruir tu imagen. Todo eso son mentiras y debido a que sirvo en el Congreso, tengo voz, la gente puede escucharme, tengo mis redes sociales, así que puedo resistir.

Pero aún tenemos más de la mitad de nuestro Parlamento ocupado por “kirchneristas”, un movimiento de izquierda que apoya a Rusia y China. Prácticamente, estarían dispuestos a apoyar a cualquier país que vaya en contra de los valores occidentales.

ARGENTINA PODRÍA ESTUDIAR PROYECTOS DE RECONSTRUCCIÓN EN UCRANIA

P: Es estupendo que haya tenido la oportunidad de venir aquí, de mantener varias reuniones y de conocer más sobre Ucrania. ¿En qué áreas podrían nuestros dos países seguir desarrollando sus relaciones bilaterales, en vista del impulso dado por su presidente?

P: Es una cuestión amplia que aún está por estudiar. De hecho, soy parte del Comité de Presupuesto y también me reuní aquí con mi homólogo ucraniano, así que lo analizaremos. Hoy en día, para mí una prioridad es compartir información y crear conciencia. Tenemos mucho que compartir sobre la llamada “invasión cultural” (en nuestro caso, se trata de la promoción de las ideas izquierdistas y marxistas entre nuestra población).

La cooperación entre empresas es, por supuesto, importante. Tanto Ucrania como Argentina son países muy ricos gracias a su suelo fértil, su industria y su gente educada. De hecho, acogeríamos con mucho gusto a los ucranianos que huyen de la guerra porque sabemos lo trabajadores que son. También podríamos estudiar proyectos de reconstrucción en Ucrania en los que nuestros trabajadores puedan participar. Por cierto, sé que hay argentinos combatiendo en las filas de sus Fuerzas Armadas…

Mientras tanto, nuestra situación económica no es muy buena. Está mejorando poco a poco, pero todavía estamos tratando de salir del pantano del socialismo. Nuestra inflación este año es más alta que la de ustedes y están en medio de una gran guerra. Desde el año pasado, hemos comenzado a ser más confiables para el mundo.

P: Dada la situación geopolítica y el vector libertario que ha adoptado su país, ¿considera que su país puede sumarse a las sanciones internacionales contra Rusia?

R: Creo que sí.

LOS QUE COMPRAN EL GRANO QUE RUSIA ROBÓ A UCRANIA TAMBIÉN DEBEN RENDIR CUENTAS

P: Uno de los puntos de la Fórmula de la Paz ucraniana es la seguridad alimentaria mundial. Rusia ha estado atacando la infraestructura portuaria de Ucrania para socavar nuestras exportaciones de alimentos, especialmente de granos, a naciones vulnerables de todo el mundo. ¿Ve usted paralelismos con la brutal política del Holodomor que en su día aplicó la Unión Soviética, pero ahora a escala global?

R: De hecho, visité el museo del Holodomor en Kyiv y me dejó una impresión muy fuerte. Vi una estatua de aquella niñita, delgada como el papel por el hambre. Tengo muchas fotografías y vídeos que iré publicando durante el resto del año para que la gente conozca este hecho. Y ahora, efectivamente, Rusia está robando el grano ucraniano. Y, en mi opinión, quien compre a Rusia ese grano robado también debería ser considerado un criminal y rendir cuentas como corresponde. Si compras un coche robado, te metes en problemas, y así debería ser también en este caso.

P: Su país participó en la primera Cumbre de Paz en Suiza. ¿Tienen previsto sus autoridades participar en la segunda cumbre?

R: En este momento no tengo información que comentar, ya que estamos lidiando con muchos problemas económicos en nuestro país. Personalmente, por supuesto, espero que el presidente Milei pueda asistir. Es cien por cien pro-ucraniano y apoya al presidente Zelensky.

LAS MEDIDAS ANTICORRUPCIÓN EN UCRANIA SON SIMILARES A LAS TOMADAS EN ARGENTINA

P: Durante esta visita, ¿qué otras reuniones tuvo?

R: Me reuní con representantes de la Plataforma de Crimea, del Grupo de Amistad argentino-ucraniana en la Verjovna Rada, con el primer vicepresidente de la Verjovna Rada, Oleksandr Kornienko, con el equipo de la Fiscalía General y con el señor Andriy Kostin (en aquel momento fiscal general, ed.), con el defensor del pueblo Dmytro Lubinets, con representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores y con otros funcionarios. También tuvimos la oportunidad de reunirnos con representantes del Estado y de iniciativas públicas ucranianas que se oponen a la desinformación rusa. También nos enteramos del Instituto Ucraniano, visitamos la Laura de Kyiv, el aeródromo de Gostómel, las ciudades de Moshchun e Irpín, visitamos la Academia Boychuk y el Hospital Okhmatdyt, nos reunimos con el personal de la organización benéfica Zemliachka, la ONG Arm Women Now y vimos las manifestaciones de Azov.

En la reunión con el fiscal general, hablamos de la desinformación y sobre lo similares que son las medidas anticorrupción que está tomando Ucrania a las que estamos tomando en Argentina.

Una de las narrativas que Rusia está promoviendo es que Ucrania era tan corrupta que tuvieron que intervenir. Bueno, primero, incluso si fuera cierto, eso no es una excusa para invadir a alguien. Segundo, mire quién habla… La corrupción en Rusia debe ser peor que en cualquier otro país de la región. Y, tercero, veo que Ucrania está intentando combatir la corrupción, denunciando los esquemas y haciéndolos visibles para el público en general. También luchamos contra la corrupción la corrupción sacándola a la luz antes de pasar a solucionar el problema.

Estamos tratando de convertirnos en miembros de la OCDE, por lo que debemos cumplir con ciertas normas internacionales en este sentido, lo que incluye modificaciones a la Constitución y a varios Códigos.

Pero Kostin nos contó cómo Ucrania tuvo que seguir trabajando con los Códigos más antiguos después de recuperar la independencia en 1991… Llevó tiempo limpiarlos de las normas soviéticas obsoletas. Así que, ahora los funcionarios argentinos están en el proceso de desregular muchas áreas, tratando de dar más libertades a la gente, establecer un mercado libre.

Uno de los principales casos en Argentina fue que desde 2001, el gobierno comenzó a dar dinero a personas pobres como asistencia social para que realizaran algún trabajo comunitario, en lugar de proporcionarles empleos reales. Pero todo el mundo en Argentina sabe que después de 24 años de dádivas, la proporción de la población vulnerable sólo aumentó. Eso es lo que siempre ocurre cuando se da dinero y no educación ni empleos. Y dentro de ese esquema, había gente, socialistas, que actuaban como intermediarios en la sombra entre ese dinero y sus destinatarios, exigiendo sobornos.

Además, exigían a los destinatarios de ese dinero que salieran a protestar contra el gobierno, de lo contrario bloquearían los pagos. Así que tenían a los pobres como rehenes. Así que lo que finalmente hizo el gobierno fue eliminar a esos intermediarios y, de repente, no había nadie que saliera a las calles a protestar contra el gobierno porque nadie tomaba a la gente como rehenes. Había una línea directa a través de la cual la gente podía avisar a las fuerzas del orden sobre estos intermediarios corruptos. Desde entonces, no hemos tenido grandes disturbios sociales.

EL TEMA DEL SECUESTRO DE NIÑOS POR RUSIA LES TOCA A LOS ARGENTINOS DEBIDO A SU PROPIA HISTORIA

P: Una de las cosas más importantes que quería abordar es la campaña rusa de secuestro y deportacion de nuestros niños de Ucrania.

R: Creo que es uno de los momentos claves que los argentinos deben conocer porque durante la dictadura de 1976 a 1983, tuvimos alrededor de 800 niños secuestrados por los militares mientras sus padres desaparecían. A esos niños les cambiaron los nombres. Durante años se ha hecho un esfuerzo, que ha tenido cierto éxito, para encontrar a esos niños. Nuestro país puede entender este problema. Ahora, Ucrania ha visto a unos 20.000 niños (casos confirmados) secuestrados por el gobierno ruso para adoctrinarlos aún más.

Un día intentarán obligarlos a matar a su propia gente, lo cual es terrible. Esta es una de las historias, dado este tema tan sensible para Argentina, en torno a la cual creo que eventualmente podremos convencer a la izquierda de condenar a Putin, dejando atrás su ideología.

P: Incluso la orden de arresto de la CPI está relacionada con los crímenes contra los niños.

R: Esto es algo universal, cualquiera lo entiende porque este crimen es tan claro como el cielo.

EN RUSIA, LA GENTE COMÚN PUEDE NO ESTAR LISTA PARA ACEPTAR LA VERDAD SOBRE SU DICTADOR

P: Rusia está promoviendo activamente el término “Sur Global”, y Sudamérica, por supuesto, incluido su país, Argentina, es parte de él, según la narrativa de Moscú. Tratan de pintar una imagen en la que hay un mundo occidental malvado, antiguos colonialistas y opresores, aquellos que explotan sus recursos naturales y que ahora apoyan a Ucrania, y hay un Sur Global que definitivamente debería ponerse del lado de Rusia y sus pocos aliados que tiene...

R: Es decir, ¿Rusia dice que Argentina es el Sur Global? Nunca tuve idea de que lo fuéramos. De todos modos, eso es exactamente lo que los izquierdistas han estado diciendo a la gente en Argentina. Eso es marxismo cultural, lavado de cerebro. Pero estamos en vía de escapar de todo eso. Los países donde esas ideas han arraigado firmemente son Cuba y Venezuela. Por cierto, las fuerzas de Maduro perdieron las elecciones en Venezuela, pero falsificaron el resultado para permanecer en el poder y arremetieron contra los manifestantes, metiéndolos en la cárcel.

Y durante años, las personas que han estado huyendo de Venezuela a Argentina nos han estado contando, explicándonos lo que está pasando allí. Así que estas personas contribuyeron al cambio de mentalidad de nuestra gente, ayudándola a aceptar nuevas ideas. Si las naciones hablamos entre sí a un nivel humano, creo que eso puede generar cambios.

Estoy segura de que, en países como Venezuela, Corea del Norte, incluso Rusia, hay gente que podría volverse en contra de sus líderes, esos dictadores, si tan solo supieran la verdad. Pero no están informados de la verdad, o tal vez simplemente no quieren aceptarla, este también podría ser el caso. Pero sin duda llegará un día en que no tendrán más remedio que aceptar esa verdad.

Lo que quiero decir es que los gobiernos no siempre representan verdaderamente a su pueblo ni reflejan sus ideas.

Nuestro ex presidente, el peor en realidad, Alberto Fernández, siguió haciendo negocios con Rusia incluso después de la invasión a gran escala de Ucrania en 2022. Intentó servir de puente entre Rusia y América Latina.

Y Cristina Kirchner, aliada de Fernández, pactó con Irán… Además, eran amigos de las dictaduras de Venezuela… Son todos amigos y difunden información errónea por las universidades y otras instituciones para convencer a la gente de que Rusia y sus aliados son los buenos y que Occidente, en conjunto, es el malo.

Pero si la gente tiene acceso a la verdad, si se puede difundir esa verdad entre la gente, especialmente a través de las redes sociales, eso puede generar cambios. De hecho, las redes sociales son muy importantes para que ganáramos las elecciones. Las autoridades intentaron censurarlas, como ahora aplican la censura en Brasil a X, el antiguo Twitter.

P: Nuestros principales funcionarios gubernamentales e instituciones estatales están realmente activos en las redes sociales para que la gente pueda obtener más información sobre nuestro país, incluso suscribiéndose a esas cuentas. A propósito, ¿está en contacto con nuestra Embajada en Argentina?

R: Estoy en contacto con su embajador en Buenos Aires, Yuriy Klymenko. Ya hemos tenido varias reuniones y hemos empezado a colaborar e intercambiar información. Pero también me parece muy importante que hagamos visitas. Cuando uno viaja y se reúne con funcionarios y el sector cívico sobre el terreno, siempre resulta revelador.

¿CÓMO PUEDE SER ETIQUETADA DE NAZIS UNA NACIÓN QUE ACOGE A TANTOS PEREGRINOS JUDÍOS?

P: ¿Qué es lo que más le impresionó de este viaje?

R: En primer lugar, me impresionó lo hermosa que es Ucrania, y en particular Kyiv. La capital es más grande y más bonita de lo que esperaba, así que me quedé realmente impresionada. Además, he viajado a muchos países antes, como cosplayer y artista profesional. Su comida es excelente, su naturaleza es hermosa. En general, creo que es uno de los países más bonitos que he visto, y he visto muchos. Por supuesto, me sorprendió lo grandiosa que es su gente. Mientras tanto, la propaganda ha estado afirmando que los ucranianos son una nación incivilizada. De hecho, lo mismo ocurre con los argentinos: la forma en que se los describe a nivel internacional. Pero su gente, y nuestra gente, son realmente grandiosas.

También viajé un poco por Ucrania. Me llevaron a Uman, donde Ucrania recibe a muchos peregrinos jasídicos. Un lugar hermoso. Ahora que lo pienso, tantos judíos acuden en masa a Uman y Rusia sigue afirmando que Ucrania es un país nazi. ¿Cómo puede ser eso posible? Y más aún, su presidente es de origen judío. A propósito, el presidente Milei está investigando el judaísmo, su abuela era judía. Algunos dicen que incluso tiene en mente convertirse algún día, aunque la verdad es que no es una persona religiosa. Yo diría que es más bien una persona espiritual.

En realidad, mi bisabuela era de Polonia y también era judía. También he estado en Israel. Incluso tengo una estrella de David tatuada en el brazo. Mis raíces familiares provienen de Ucrania, Polonia e Italia, y todos estos países se vieron afectados de una forma u otra por los nazis, los comunistas o los fascistas. Mi familia se vio obligada a huir y ahora estamos aquí, una vez más luchando contra este mal.

Entrevista realizada por Ievgen Matiushenko, Kyiv

Foto: Pavlo Bagmut

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